LA AVENTURA COMIENZA
CUANDO
POR AMOR
TENEMOS EL VALOR DE ENFRENTAR LA VIDA


todos podemos tener un momento de duda

10 octubre, 2007

con cuchillos(en los dientes)

A veces, los problemas nos superan y no podemos más con ellos.
A veces, hay momentos en que no soportamos a otra persona y así de simple. No pasa porque seamos malos. Ni menos porque odiemos a esa persona. Creo que la detestamos por un segundo y lo peor, al menos en mi caso, es que no podemos ir en contra de ese sentir de des-agrado.

Lo peor de todo es que me suele ocurrir.

A veces, amanezco con una pared negra frente a mis ojos, que no me deja avanzar. Me cierra, me nubla, me ensordece. Me enmudece. Me vuelvo retraída y cuando hablo, exploto, sobre todo si hay algo que no me parece bien.

Cuando las situaciones no nos agradan, creo que podemos ser bestias. Es increíble como el ser humano considera verdades irrefutables y es más increíble aún cuando nos damos cuenta que el lenguaje es tan amplio y tan distinto que pueden existir muchas apreciaciones de lo que decimos; se pueden formar muchísimos puntos de vista diferentes o incluso se puede distorsionar totalmente lo que uno cree, dice, siente, expresa, manifiesta. Incluso el lenguaje de nuestra mirada puede ser traicionero, cuando no queremos enunciar palabra alguna, sino que quemamos o matamos con la mirada. Sufrimos en silencio con la mirada, aunque quizás esto nadie lo note (el lenguaje de la mirada)

Sin embargo, sólo algunos lo descubren. Son aquellos que no necesitan palabras, sino que lo notan de inmediato. No estoy diciendo con esto que las palabras no sean importantes. Claro que lo son. Siempre es bueno establecer conversación, diálogo. De todos modos, cuando la comprensión de una mirada solitaria, perdida, contenta, enfurecida es notada por cada uno de nosotros como primer intento de acercamiento a otro humano, el asunto se vuelve una conexión única. Por eso pasa que no todos comprendemos las miradas de todos, sino que percibimos el sentir de las miradas cercanas, de esas miradas nuestras o de esas miradas que no podemos dejar de mirar. Aquellas miradas que brindan momentos únicos, que abren el cielo, que iluminan las batallas de nuestro cuerpo, cansado de vivir, alegre de vivir. Arrepentido. Galardonado. Reconocido. Traumado. Destruido. Nuestro cuerpo feliz de ser cuerpo y alma, de ser mirada, de ser pasión, de ser sentimiento…

Aquellas miradas que logran comunicarse con el sentir que llevan a cuestas suelen ser aquellos tesoros que consideramos fundamentales en nuestras vidas. Esas personas por quienes darías todo, pero que, a veces, te hacen detestarlas porque sí. No hay razón, aunque si pensamos puede que la haya. La razón sería la conexión tan cercana y única. Ese vínculo tan importante que tenemos con nuestros cercanos, con aquellas personas que conocimos por algún motivo determinado. Se hacen tan cercanos a nosotros que comenzamos a sentir con ellos y no sólo a quererlos, sino a detestarlos, enojarnos con esas personas, alegrarnos con y por ellos.

Aquellos que se vuelven nuestros compañeros de caminos. Compañeros de esa ruta peligrosa en la cual alguna vez emprendimos viaje cuando decidimos nacer y aprender a descubrir el lugar donde vivimos, las personas con quienes con-vivimos, asunto que no es menor, ya que con-vivimos con todo humano que esté cerca nuestro, aunque no haya cruce de palabra. Aunque no lo vuelvas a ver más, porque personas hay muchas, tantas como autos y farmacias por cuadra en Santiago, el lugar donde he vivido desde que nací. Lugar que es mi refugio y de donde han salido aquellos seres cercanos que nos hacen cambiar el rumbo, que nos acompañan, nos hacen reír. Aquellos que nos ayudan a darnos cuenta que estamos vivos y que el futuro es algo que está más cerca de lo que creemos y que el presente es inseguro.

Aquellos humanos que nos empujan contra vientos caóticos y nos hacen reflexionar. Nos hacen dar cuenta que existimos, donde queremos existir y donde, a veces, queremos des-aparecer.

2 comentarios:

Aristo Risato dijo...

Estas sinceras líneas
que nacen en mí
te buscan confusas

...buscan celosas el camino a ti
perdidas sin tiempo

atraviesan dimensiones negras
y vacías
oscuras y frías

haciendo música celeste
de cristal y silencio
lanzada a tus ojos

furiosa y arrepentida
a tocar en detalles tu sentir
para hacer carne la imagen

y olerte suave
y tocarte despacio
y tomarme lento el tiempo

para escucharte respirar

y ser en ti besándote...
mirándote tranquilo ser en flor

borracha de amor
ebria de mí.

Aristo

Aristo Risato dijo...

hermosa mía te regalo la vida
las sonrizas diminutas
y las flores imposibLes

la iLusión beLLa de soñar
feLiz
como lo son los niños

el amar eternamente
el reírse indiferentes de los pre-juicios modernos

...

te regaLo cada segundo de mi vida
mi vida te la regaLo a cada segundo

tómaLa

SUEÑO

EN UN SUEÑO SUMERGIDO